CERREMOS LA BRECHA INFORMATICA

Y AVANCEMOS HACIA EL MUNDO MODERNO

 

 

 

Un estudiante de Ingeniería en Sistemas  preocupado  por su futuro laboral me preguntó: ¿Porqué no hay demanda de programas (software), si hay profesionales que pueden hacerlos? –Pensé en seguida – Su preocupación es correcta – Rápidamente descubrí que en la ciudad de Estelí sólo una farmacia tiene sistemas computarizados para hacer sus operaciones, de los tres supermercados uno recientemente modernizó su sistema de caja manual a una automatizada que utiliza scanner y códigos de barra; ninguna escuela privada o pública tiene un portal en Internet, esto sólo por mencionar algunos ejemplos de la gran brecha que tenemos en lo relacionado a tecnología informática. Esta situación se reproduce en todo el país, incluyendo la capital. Después de algunos segundos –le dije – veamos esto de manera más amplia y  preguntémonos – ¿Porqué las empresas especialmente las medianas y pequeñas así como las familias no aprovechan más las tecnologías disponibles en el mercado? –.

 

Mientras tanto, recordaba que hace quince años el problema se le atribuía a los altos costos de los productos informáticos (Pc y accesorios), y a la poca oferta de servicios para su mantenimiento y para conexiones a Internet.

 

Con relación a esto último encontré que, el Diario La Prensa (17 Dic. 2002), publicó un artículo de Cornelio Hopmann, -especialista en Informática- quien exponía que de 130 mil familias con capacidad de tener una conexión a Internet, sólo el 13% estaba conectado; y  de las empresas sólo el 8% está aprovechando el potencial de Internet. Estaba claro que ni los que podían hacerlo (que tienen recursos), lo hacían. ¿Qué estaba pasando?.

 

Hopmann concluyó en aquel momento, que hacían falta políticas para impulsar una buena coordinación y liderazgo, que se ocupara de divulgar las ventajas de Internet, y promover la creación de una red de datos a nivel nacional. Aprovechar la infraestructura de fibra óptica del caribe (Puerto Cabezas y Bluefield), lo que bajaría los costos de los operadores y por consiguiente a los usuarios finales. También aseguró que  habían recursos suficientes para hacer mejoras necesarias  -No es un problema de dinero- aseguró.

 

Actualmente TELCOR (Ente regulador), estima que hay unos 25 mil suscriptores de Internet, aunque en sus datos publicados en la Web muestran para 2005 unos 18,497 suscriptores. Esta situación de cualquier forma, no cambia mucho el rezago informático que el país atraviesa.

 

En el período comprendido  entre el 2005 y 2006 se observaron inversiones privadas en el sector; parece que hay planes cercanos para aprovechar el sistema de fibra óptica del caribe.  Según TELCOR, el 41% de las conexiones son por cable, que es una oferta de servicio con mayor velocidad. En el interior de país ahora casi todos los departamentos cuentan con la posibilidad de conectase con  tecnología  DSL de alta velocidad. Mientras todo esto pasa, la tecnología informática a nivel de usuarios finales no parece cambiar mucho –el rezago continúa-.

 

Concuerdo con  Cornelio Hopmann, en que hay que impulsar políticas y estrategias que favorezcan la coordinación entre los sectores involucrados, que promuevan el uso de tecnologías informáticas, ya que éstas ofrecen ventajas.  Pero también creo firmemente, que se deben tomar medidas más proactivas, que nos permitan salir del atraso informático actual que vivimos.

 

Por tanto, deben aplicarse políticas que vayan más allá de la coordinación y divulgación, medidas que promuevan activamente el uso de la  informática. Para ello, el sector público tanto a nivel municipal y nacional debe crear mecanismos -usando tecnología informática- para aprovechar al máximo los beneficios que trae consigo. Se deben promover los pagos de impuestos a través de Internet, que las escuelas y universidades públicas y privadas, por ley ofrezcan la posibilidad de hacer los pagos de aranceles y otros servicios a través de bases de datos disponibles en portales desarrollados para tal fin (ver notas, eventos, horarios etc.). El sistema de salud pública que regula el sector de alimentos y farmacias debe crear un sistema de control por Internet  y  finalmente el sistema  fiscal debe premiar a las empresas que declaren sus impuestos y lleven sus contabilidades con tecnologías informáticas. –Soñamos con pagar la luz, el agua, el teléfono y los impuestos por Internet –

 

Si se aplican políticas como las mencionadas, seguramente se incrementará la demanda de software, -que tanto le preocupa a los estudiantes de informática- la que según el Nuevo Diario (18 oct 2005), no está satisfecha; a su vez esto requerirá de  muchos recursos humanos formados en  informática que actualmente están desempleados.  Aumentará la necesidad de crear Intranet empresariales y conexión a Internet. En fin se desarrollarán todos los servicios y productos informáticos que permitirán cerrar la brecha que actualmente tenemos.

 

Ojala los gobiernos dejen de ser espectadores y se conviertan en auténticos facilitadores de la actividad privada y ejecutores de proyectos estratégicos, como el desarrollo de la informática en nuestro país. Tenemos la tecnología en nuestras manos, hagamos uso de ella, avancemos hacia el mundo moderno, con un mayor  acceso y facilidad de hacer las cosas de manera más eficiente y oportuna.

 

 

Ing. Juan Leonardo Chow Z.

Gerente SEJICSA

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