UN MUNDO OSCURO PARA QUIENES CREYERON VER LA LUZ

 

Muchas son las incógnitas de los niños que vemos por las calles y que les llamamos muy similar (niños de la calle) se hacen a diario al tomar este desafortunado camino ya que las circunstancias de la vida les negaron lo que ellos soñaban. Solo con el amor de Dios y con las esperanzas de una oportunidad y que el mañana sea mejor que el ayer, su aventura comienza. Muchos de ellos haciendo travesías, otros trabajando ardua y honradamente, otro luchando en contra de las injusticias, unos con rostros de tristeza, con lágrimas en los ojos, con dolor en el alma y por el repudio que la sociedad a diario les hace.

 

Los encontramos en todos lados, en las paradas de buses, parques, plazas, de barrio en barrio y muchas veces nos volvemos indiferentes a ellos. Sin saber el porque de la situación de los mismos. Hoy en día a diario crece la taza de niños que son expuestos y empujados al abismo de la violencia, las violaciones, el crimen y por ultimo la muerte. Porque es lo único que se puede esperar de estos niños en esa situación.

 

Gran parte de este fenómeno se debe a la situación económica social, política que atraviesan muchos pueblos y también de la irresponsabilidad de muchos padres que sin medir las consecuencias y la responsabilidad que requiere traer un hijo al mundo, este fenómeno se aumenta cada vez más.

 

Pero no se trata de buscar culpables, es momento de actuar y de proponer programas y leyes que contribuyan a disminuir esta problemática. Lo correcto no es portarnos indiferentes ante este hecho, sino disponer de medios y recursos para formar parte de ese conjunto de personas que con nuestro aporte podríamos cambiar el rostro de angustia a un rostro de felicidad a esos niños que tanto lo anhelan.

Si queremos una sociedad mas justa y con mayores condiciones de vida para todos, es momento de hacer algo, tal como hacer que las instituciones que cuidan y protegen a estos niños hagan cumplir sus deberes y derechos. Porque en gran parte las leyes se elaboran, se ejecutan, pero no se revisan su cumplimiento. Un eje de referencia principal en la sociedad, es el rol que juega la escuela en función de la educación a niños, jóvenes y padres. Esta debe ser en vía de un mejor enfoque social de reivindicación a todas las personas por igual, que quiero decir con esto, los padres deben velar por sus hijos y su educación, los maestros garantizarla y la sociedad darles el espacio donde puedan desempeñarse profesionalmente.

 

Si bien decimos “Los niños son la esperanza y el futuro de la patria” entonces que futuro podemos ver en un niño abandonado, sin sueños, sin esperanza, sin aspiraciones y sin rumbo alguno ¿Será entonces que ellos son el futuro?. La educación en los niños no es un negocio, es una inversión,, no le neguemos la oportunidad de llegar hacer grandes hombres como lo sueñan de niños.

 

 

Prof. Rene Alonso Mendoza.

Instituto German Gmeiner, Estelí.

Telf. 424-5081.