EL VERDADERO HOMBRE |
A quién podemos catalogar como un verdadero hombre o en
otras palabras quien es aquel que verdaderamente muestra cual es su hombría,
será acaso aquel que tiene un cuerpo de Hércules o el que tiene la habilidad
de darse de golpes con otro hombre o aquel que tiene el valor de liarse a
punta de balas con otro. Será aquel que tiene la virilidad para tener una y
otra mujer y a cada una de ellas le da como muestra de hombría uno o más
hijos, los cuales quedan abandonados quienes posteriormente seguirán el mismo
camino de ese que parece ser todo un hombre. Será hombre aquel que tiene una
voz ronca y sonora y con ella puede elevarla para gritarle a su esposa o
compañera y de igual modo a padres y a sus hijos, será acaso aquel que se
preocupa por llevar el dinero a casa para el alimento y que luego olvida dar
una buena educación a su familia. Será posible que todas estas características y quizás hay
muchas más que mencionar los que determinan que realmente una persona es todo
un hombre. Creemos que en este particular podemos hacer uso de una
frase muy conocida en nuestra tierra y es esta: “No todo lo que brilla es
oro”, para referirnos al tema no todo el que aparenta ser un hombre es un
hombre y si lo decimos de esta manera no todo el que lleva pantalón es un
hombre. ¿Por qué decimos esto? Porque el término hombre encierra muchas cosas
importantes como son: responsabilidad, deberes que cumplir y también derechos
que respetar, pero en este siglo que vivimos se han perdido los valores que
deberían estar presentes en el sexo masculino. Dios creó al hombre y le
delegó una tarea importante como es el cuidado de su creación, le dio la
responsabilidad de velar por una familia y cumplir con ella en todo lo que
sea necesario. Estamos viviendo un siglo donde la irresponsabilidad está
a la orden del día, las infidelidades, los maltratos físicos y verbales y
muchos le dan como un atributo de hombría, cosa que no es cierto sino más
bien es cobardía. Si alguien dice ser hombre de verdad debe llenar una serie
de requisitos para ser aprobado en este nivel. Por ejemplo, como hombres
debemos ser responsables en el trabajo, en el hogar, con los padres, con la
esposa, con los hijos, darles un trato digno, proveer todo lo que la familia
necesita comenzando con el amor hasta terminar proveyendo toda clase de bien.
Todo verdadero hombre debe procurar apartarse de toda clase de mal, evitar al
máximo las rivalidades, los desacuerdos que cuando veas que alguien quiere
ponerte a pleito tú puedas evitarlo y hagas lo que dice la palabra de Dios:
“El sabio ve el peligro y se aparta, más el necio lo ve y más se mete”. El ejemplo más digno de imitar en cuanto a hombría se
refiere es el de Jesucristo aunque lo maldecían no respondía de igual forma,
aunque se burlaban de él no se enfadaba, quisieron meterlo en problemas y
mejor se apartaba. Si hablamos de responsabilidad él cumple con ese papel con
su Iglesia. Instamos a todo aquel que se dice hombre que en realidad, lo sea,
no solamente tenga un sobrenombre o un título honorífico. Sergio y Lilliam López García. Directores Universidad para la Familia. |