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SISTEMA PENITENCIARIO PUERTA DE -HOMBRES Y MUJERES NUEVOS PARA NUESTRA SOCIEDAD- |
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en algún momento de nuestras vidas nos detenemos a pensar en una prisión,
probablemente imaginamos un lugar sin sonrisas, sin esperanzas ni metas; pero
el Sistema Penitenciario Puerta de Empezando
por la atención brindada por los oficiales, quienes continuamente reciben
capacitaciones para atender a las personas condenadas y como dice Don Félix
Urbina -Director del Centro-, el Sistema Penitenciario en Nicaragua se ha
caracterizado por ser humanitario, conducta asumida por mandato
Constitucional, misma que regula las actuaciones y funcionamiento de las
autoridades que sirven en el correccional. La
vida dentro del penal es en todo aspecto distinta a la cotidianidad de las
personas libres, pero las oportunidades que el sistema brinda a los internos
son excepcionales. Estas se basan en la ciencia penitenciaria moderna, la
cual considera que el trabajo sirve como una ergoterapia para los internos.
Por esto, se realizan actividades como: fabricación de artesanía, pintura,
costura y carpintería; éstas generan un pequeño pero significativo ingreso
económico, que sirven para suplir de materia prima a los talleres, el ingreso
restante se le entrega a los familiares de los internos. Además del trabajo,
se promueven actividades culturales y deportivas, así como programas
educativos impulsados por Los
resultados de estas acciones tomadas por el Sistema Penitenciario y otras
instituciones están dando resultados espectaculares; como es el caso de Rufino Laguna, interno
que está agradecido, porque en 7 años que lleva recluido, logró en el año
2006 concluir exitosamente sus estudios de secundaria (5to año). Pero, para
lograr esto, él ha tenido que sobreponerse para cambiar completamente de lo
negativo a lo positivo, al igual que lo tienen que hacer todos los reclusos
para demostrarles a la sociedad que su vida ha cambiado, para bien. Un
aspecto importante en la vida de los internos es su situación familiar.
Nuestra cultura, es exigente en cuanto al afecto y presencia de la familia;
para un interno la ausencia de la familia puede ser una experiencia
devastadora, el Director del Centro Penitenciario - Don Félix Urbina- explica
que los internos presentan distintos problemas cuando la familia se aleja.
Uno de los internos entrevistados opina que la familia es el motivo para
continuar disciplinado y seguir estudiando, para que cuando salga pueda
cambiar su vida y la de los suyos. Hoy
en el Penal existen personas de gran provecho que verdaderamente se
arrepienten de haber infringido la ley. Estas personas esperan su libertad
para demostrar que son personas nuevas y que tienen mucho que ofrecer a la
sociedad. No
obstante, existe un panorama hostil, para aquellos que han recobrado su
libertad; lo primero que se le solicita para una posición laboral es el
Record de Policía, pero éste no incluye las características disciplinarias ni
los logros alcanzados por los internos en su rehabilitación, sino que
únicamente se destacan los distintos cargos por los cuales estuvo en la
cárcel. Es como se comporta nuestra sociedad, sin
embargo, algunas ONG´s trabajan en pro de los
hombres nuevos y reconocen el cambio que se ha gestado en ellos, brindándoles
una segunda oportunidad. No
olvidemos que somos humanos y no estamos exentos de cometer en cualquier
momento un error que nos puede llevar a la cárcel, por lo que no
discriminemos a los internos y aprendamos de su experiencia a caminar por el
bien. Cada uno de nosotros tiene el libre albedrío y podemos decidir el
camino a andar. El
penal y los internos en general están muy agradecidos con todos aquellos
ciudadanos altruistas que los apoyan para continuar estudiando. También hacen
especial reconocimiento al apoyo espiritual que reciben, de la comunidad
Cristiana Evangélica y de Nunca
es tarde para empezar y cambiar, todas estas personas que han cometido
delitos, sí pueden ser diferentes, todo es fuerza de voluntad y cambio de
actitud. Nunca se debe de cometer el mismo error, porque se paga con un
precio muy alto. Seamos buenos ciudadanos, servidores de la sociedad, hay
muchas cosas buenas que se pueden dar a cambio de la violencia, como es el
amor, paz, aceptación, cariño, respeto, honradez, responsabilidad y disciplina,
porque a como se dice por ahí, aunque la jaula sea de oro nunca deja de ser
prisión, y quienes sufren es la familia, al no tener esa persona cerca o
talvez se avergüenzan por las cosas incorrectas que ha hecho. Es tiempo de
cambio, tanto personal, familiar y social. Atrevámonos a cambiar en todos los
aspectos de la vida. Revista
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