MOQUILLO O DISTEMPER CANINO

 

 

 

Las primeras vacunas para la prevención del moquillo fueron realizadas en la década de los 20, pero fueron aplicadas con un éxito muy limitado, a finales de los años 50 comenzaron a realizarse vacunas con virus atenuado, muy similares a las empleadas en la actualidad y con las que se consiguió prevenir la enfermedad. El virus del moquillo canino, tiene una estructura muy similar al virus del sarampión humano. La puerta de entrada del virus del moquillo canino, es la inhalación del virus, de allí pasa a las amigdalas palatinas y a los ganglios bronquiales, siguiendo su recorrido hasta el torrente sanguíneo, este recorrido lo hace aproximadamente en 48 horas, distribuyéndose luego a todo el organismo.

Los síntomas de ésta enfermedad son variables y por ello ha sido llamada la enfermedad de los mil síntomas: decaimiento, aumento de la temperatura corporal, presencia de una secreción mucosa de color verde amarillento en los ojos y en la nariz, tos intermitente, vómitos, diarrea con estrias de sangre, conjuntivas oculares irritadas, los pulpejos de las patas (almohadillas plantares), se encuentran endurecidos y resquebrajados, el hocico también se encuentra endurecido seco y resquebrajado, desde la cuarta semana en adelante desde el comienzo de la enfermedad comienzan ha aparecer los síntomas nerviosos el que puede ser dañado irreparablemente, al igual que el sentido del olfato, el oído y de la vista.

Al ser el moquillo una infección viral, no existen para el mismo, tratamientos específicos eficaces, sino que solamente se tratan los síntomas: antibióticos de amplio espectro para evitar las complicaciones bacterianas, pero carecen de acción sobre el virus que causa la enfermedad. Las secreciones nasales y oculares se limpian con algodones humedecidos. Los síntomas nerviosos se tratan con sedantes y anticonvulsivos. Se administran complejos vitamínicos y elevadores inespecíficos de las defensas con el objeto de fortalecer al paciente.

El pronóstico de la enfermedad es de reservado a grave. Los animales que se recuperan generalmente quedan con secuelas nerviosas y su recuperación es muy larga y costosa. La eutonasia es un recurso que hay que considerar, una vez que se hayan agotado todas las alternativas medicomentosas y el animal sufre continuamente.

Prevención: La protección más segura es la vacuna. La primera vacuna preventiva contra el moquillo canino se realiza a las seis semanas de vida del cachorro, aplicando vacunas mensuales según el calendario que aplique el Médico veterinario. Las vacunas que se aplican a los caninos no lo inmunizan de por vida, así que se deben realizar vacunaciones anualmente.

 

Dr. Alejandro Briones R.

Veterinaria  Las Mascotas.

Tel. 714-1036

 

El moquillo o Distemper Canino también denominado enfermedad de Carré, es producida por un virus. Se conoce como una enfermedad importante y generalmente mortal no sólo para la especie canina sino para varias especies de carnívoros domésticos desde hace aproximadamente 200 años. El virus del moquillo fue hallado por Carré en el año 1905, y lo describió como un virus filtrable. El Moquillo  es una enfermedad vírica muy peligrosa, especialmente para los cachorros, también ataca a perros mayores, pero con poca frecuencia. Más del 50% de los perros adultos que contraen la enfermedad, mueren y la tasa de mortalidad en cachorros anda en un 80%.