EL DESARROLLO DE REDES

 

 Se comprueba cada día más que el éxito como profesional reside en la capacidad para cultivar, mantener y movilizar una vasta gama de relaciones dentro y fuera de la organización; por lo que la construcción de redes es una herramienta vital.

 

Recientes estudios demuestran que casi el 80% de las recolocaciones laborales resultan de buenas redes de contacto. Dichas relaciones también contribuyen al éxito en la iniciación de nuevos negocios.

 

Pero, ¿cómo se crea una red sólida de contactos?...... La respuesta es; “desarrollando relaciones auténticas, centrándose en lo que usted aporta a la otra persona, reciprocidad e inversión en la red: en resumen, dar más que recibir”. Crear estas redes es un tanto difícil, debido a que en la sociedad actual se privilegia el parecer, más que el ser. Una relación auténtica se basa en la comprensión y beneficio mutuo, que es muy difícil conseguir en un mundo en que pocos están dispuestos a dar.

 

Lo más importante y sencillo que se debe hacer, es pensar en el otro, y un poco menos en nuestros deseos y necesidades. Piense en términos de contribución:

¿Qué puede aportar usted? ¿Cómo puede cambiar la vida de esta persona? ¿Cómo puede ayudarle a satisfacer sus necesidades? Ha de ir tan lejos que usted mismo se salga de la ecuación y sea capaz de ayudar a las personas sin expectativas de recompensa, sin esperar beneficiarse a cambio. Cuando se hace esto, nace una maravillosa paradoja: a usted también le ayudarán. Construya su éxito en función de construir el éxito de los otros.

 

Uno de los peores abusos en la construcción de redes es acudir a su red sólo en momentos de necesidad. Los profesionales de red inteligentes se dedican a ella, especialmente cuando no la necesitan. Ayudan y dan continuamente. Siempre están en contacto, cuidan y alimentan sus relaciones. Porque, en el fondo, el encanto de la red no está en el empleo que se obtiene ni en la venta que se hace, sino en la oportunidad de participar por entero en las vueltas que da la vida.

 

En síntesis,  constituye una actividad donde los participantes interactúan con un espíritu de colaboración en el que prima el principio de personas ayudando a personas.

 

El éxito en el mundo actual depende cada vez más de las facultades para relacionarse: de lo bien que construyamos relaciones con colegas, superiores, subordinados, grupos, equipos, clientes, proveedores, inversionistas y muchos otros. Desde luego, la causa principal del fracaso de los ejecutivos que se hacen cargo de un nuevo desafío es el fracaso en el desarrollo de buenas relaciones.

 

Estudio tras estudio demuestra que el éxito como profesional reside en la capacidad para cultivar, mantener y movilizar una vasta gama de relaciones dentro y fuera de la organización y las necesidades de construcción de estas redes se hacen cada vez más importantes a medida que se asciende. La construcción de relaciones ha sido siempre una parte importante del trabajo de un ejecutivo, pero hoy día es absolutamente crucial. El mundo de los negocios está cambiando de manera tan fundamental, que se necesita y exige, nuevas formas de dirigir y el éxito depende más que nunca de lo bien que se construyan y dirijan las redes de relaciones.

 

Autor: Fernando Vigorena