|
|
|
La pornografía es una vieja realidad de la condición humana que
evidencia los componentes más turbios de la naturaleza dañada por el pecado. Durante
el último cuarto de siglo ha adquirido una amplitud nueva y ha pasado a
constituir un serio problema social, mientras crece la confusión respecto a
las normas morales. Por otra parte las comunicaciones han hecho la pornografía accesible al
público incluyendo a niños, jóvenes, hombres y mujeres. Este problema que
anteriormente quedaba confinado en el ámbito de los países ricos, con la
comunicación moderna ha comenzado a corromper los valores morales de las
naciones en vía de desarrollo. Resulta alarmante como algunos medios de comunicación tienen una gran
influencia con la exposición de la pornografía tales como: cine, revistas,
libros, teatro, televisión, videos e Internet. A pesar de lo que dicen sus defensores,
ésta tiene grandes repercusiones en el comportamiento sexual de las
personas y en la visión del sexo. Podemos considerar que quien está expuesto
a la pornografía, tiene más probabilidad de desarrollar tendencias sexuales
anormales. Este fenómeno es un problema en la sociedad que afecta a grandes y a
chicos sin respetar religión, raza ni color; cada día se arraiga más en los
jóvenes y adolescentes, provocando grandes estragos psicológicos sociales y
personales destruyendo valores morales, espirituales, culturales, estatus
sociales y hasta la misma familia. Siendo un tema tabú y oculto en nuestros hogares y en la sociedad, está
haciendo mucha relevancia en nuestros niños, adolescentes quienes por
curiosidad y tentación se han atrevido a entrar en el mundo de la
pornografía. Algunos medios de comunicación son partícipes de este fenómeno, ellos
solo buscan la manera de obtener mayores ganancias sin importarles en ningun momento, el daño que causan a las personas que
entran en contacto con la pornografía. Se ha convertido en una
industria lucrativa, donde se explota la debilidad humana especialmente la de
los jóvenes y con ello obtienen provecho de producciones pornográficas.
Tendiendo redes para aquellas personas que se sienten incapaces de establecer
una relación de pareja por timidez, por sentirse menos y despreciados.
Influye también la falta de información en sus hogares, ya que los padres
piensan que es mejor que los hijos entiendan estos conceptos -según ellos-
cuando tengan una edad adecuada, la obsesión por el sexo en algunas
personas, influenciados por el grupo con el que se relacionan. Como consecuencia, la pornografía produce en sus consumidores una
verdadera adicción. Nadie puede considerarse inmune ante los efectos degradantes
de la pornografía; o exento de la erosión moral causada por los que actúan
bajo su dominio, siendo los niños y adolescentes más vulnerables y expuestos
a ser victimas. En ellos se interrumpe el desarrollo sano y adecuado, debido
a que obtienen información de sexualidad de forma negativa, pervirtiendo de
esta manera sus relaciones humanas. La pornografía induce a actos violentos, en muchos casos al aislamiento
haciendo a un lado la parte sensible, la expresión de sentimientos tanto en
sus relaciones interpersonales como conyugales. Es importante brindar la debida información, proponer leyes que
restrinjan el uso de pornografía. Que las universidades y colegios desarrollen conferencias para orientar
a estudiantes sobre el tema. Estudiantes del FAREM- Estelí. Ligia Elena Aguilera Arostegui. Gioconda Yunieth Chavarría Ramírez. Derling Ileana Flores Toruño. |