PINTURA DE RAMIRO LOPEZ: PAISAJE Y POESIA DE LA MONTAÑA

 

 

 

 

El pintor Ramiro López nació en Pueblo Nuevo, departamento de Estelí. Durante la escuela primaria por orientaciones y motivación de la maestra Angelita Morales hace mapas productivos y pinturas  relacionados con  nacimientos cercano al periodo de Navidad. Eran figuras de pastores, reyes magos, animales del tamaño de un pliego de papel periódico, realizó unos  30 trabajos para decorar las paredes del aula de clases.

 

Durante el periodo de estudios secundarios en el Instituto San Francisco de la ciudad de Estelí, recibió clases de iniciación artística por el profesor Agenor Hidalgo en 1962-64. En una ocasión el dibujante y pintor Donaldo Altamirano llegó a impartirle una charla sobre las técnicas y pasos metodológicos como dibujar un rostro.

 

Para el año de 1968 durante sus estudios de agronomía en la Escuela de Agricultura de Estelí su compañero de clase Alejandro Floripe, le obsequio un estuche de pintura de aceite  y le prestaba libros de pintura de la colección Grolier, le atraía la obra de los pintores Rembrandt, Renoir y Dalí, así fue conociendo un poco de la historia del arte y posteriormente fue adquiriendo algunos libros sobre pintura y materiales como pequeños tubos de óleo en la librería Argeñal.

 

Se inicia a pintar con óleo en una selección  de pocos colores co-mo: amarillo, rojo, azul y blanco, con estos hacía mezclas, aplicándolos con caña de bambú sobre recortes de plywood.

 

En 1970 se fue al poblado de San Juan de Limay donde realizó pinturas de paisajes, ahí tuvo la oportunidad de encontrarse con el artista Arnoldo Solís, quien  le mostró su taller y sus cuadros. Llegaba a visitarlo por las noches para conversar y admirar su obra.

 

Cuando estudiaba francés en la Alianza Francesa en 1970-71, siempre iba a ver las exposiciones de pintura en la Escuela Nacional de Bellas Artes y en la Galería Praxis sobre la avenida Bolívar de Managua. Después se fue para México en 1972 para estudiar producción de maíz, ahí aprovecha para realizar dibujos de sus compañeros en diferentes momentos y pintó dos paisajes de Nicaragua a partir de su memoria, aplicando óleo con la técnica de espátula.

 

En esa ocasión, pudo visitar los salones del Palacio de Bellas Artes en el DF. Es el año del fallecimiento del pintor Pablo Picasso, por tal razón  un conjunto de pintores mexicanos le hacen un homenaje montando una exposición en este local. También aprovechó para ver directamente las obras  representativas del muralismo mexicano posterior a la  Revolución Mexicana, así como deleitarse visualmente en los panorámicos paisajes del pintor José María Velasco.

 

Al regresar a Estelí, Nicaragua continúa pintando paisajes y algunos rostros de amigas. Participa en la segunda exposición de pintura colectiva de este departamento en el edificio de la Inmobiliaria en 1974.

Pinta algunos cuadros de protesta contra el régimen dictatorial, unas manos asidas de unos barrotes de hierro, en otro era una mano tocando unas cuerdas de guitarra vistos desde adentro hacia fuera. Participa en la Galería Tlapacalli que dirigía el poeta Ciro Molina. Seguidamente se coordina una exposición para llevar a Managua con la Galería Arte Contemporáneo que se titula “10 pintores estelianos”.

           

Previo a la insurrección de 1978 tuvo que viajar al exilio hacia Venezuela en un periodo de seis meses, visita museos y galerías,  asistiendo a exposiciones en las ciudades de Caracas, Mérida y Valencia.

 

Pasó por un periodo de autoformación pictórica por medio de la observación y las lecturas. Trabajó mas intenso en la pintura, realizando paisajes al óleo con espátula motivado por las celebraciones del centenario de la ciudad de Estelí en 1991.

 

Realizó labores de iniciación artística destinado a niños y adolescentes en el espacio de la sala de su casa familiar en Pueblo Nuevo en 1983.Esta experiencia la retoma, cuando ya se tuvo el espacio de la Casa de cultura, les enseña las diferentes técnicas con tinta china, elaboran tintas de café, anilina negra y acuarela aplicando con caña de bambú.

 

Después se retira a trabajar y vivir en el campo en la finca de El Coyolar  al norte de Yali, ahí instala un taller rústico y comienza  a pintar cuadros de gran formato a pedido de productores del tabaco.

 

Últimamente ha realizado algunos paisajes y dos cuadros rememorando la ciudad de Estelí previo a las insurrecciones ”Avenida Bolívar-Estelí 1960” y “ Cine y Palacio de Estelí-1960” y varias pinturas abstractas en formato pequeño. Al pintor Ramiro López siempre le interesó la ecología, actualmente es miembro de la Comisión Ecológica Municipal, manifiesta que se crió en el campo y considera importante el entorno natural, el tener contacto con la naturaleza le hace plasmar la misma.

 

Del arte universal considera que admira las obras de Caravagio, la tenacidad y aguante de Miguel Angel Buonarroti, la intensidad de luz y color de Turner, los paisajes de Corot, la línea impresionista de Claude Monet, la búsqueda constante intensa de Vicent Van Gohg, los abstracto de Marc Rothko, dice que gusta de la pintura figurativa y abstracta, que no se siente limitado por una sola tendencia.

 

Del impresionismo le agrada la técnica de espátula por lo que se puede trabajar rápido sobre lo que capta del entorno y saber que color va a colocar sobre el lienzo.

 

Finalmente considera que: cada uno va evolucionando y no debe  quedarse estancado., es conveniente conocer lo que están haciendo los demás, acondicionar mejor el taller de pintura y trabajar más.

 

Bayardo Gámez

Pintor, arqueólogo y docente.