¿COMO SER UNA PERSONA AUTENTICA? |
Todos queremos ser diferentes y originales, pero ¿qué hacen las
personas que son verdaderamente auténticas?
El deseo de superación siempre será bien visto, pero con relativa
frecuencia perdemos tiempo en querer ser precisamente lo que no somos: porque
en ocasiones gastamos más de lo que tenemos para dar la apariencia de una
mejor posición económica, no se diga en el modo de comportarse o de vestir
según el círculo social al que queremos pertenecer; copiar el estilo de
hablar elocuente o gracioso que utiliza otra persona, o la tendencia a
participar activamente en conversaciones como conocedor y erudito, sin tener
el mínimo conocimiento. En resumidas cuentas, esta manera de ser se debe a la
falta de aceptación de sí mismo En ocasiones la auto-aceptación se hace más difícil por lamentarnos de
lo que no tenemos. En distintos momentos y circunstancias personas han dicho:
«si hubiera nacido en una familia con mejor posición económica, otra cosa
hubiera sido»; «si yo tuviera las cualidades que (aquel tiene...»; «si
hubiera tenido la posibilidad de una mejor educación...»; «si se me hubiera
presentado esa oportunidad...» ¿No es también una pérdida de tiempo de la que
hablamos al principio?. Para ser auténticos hace falta algo más que copiar partes de un
modelo, como si quisiéramos adueñarnos de una personalidad que no nos
pertenece, o peor aún, pasar la vida esperando «la gran oportunidad» para
demostrar lo que somos y lo que podemos lograr. Las experiencias, el
conocimiento y la lucha por concretar propósitos de mejora, hacen que con el
tiempo se vaya conformando una personalidad propia. ¿Qué hacer entonces para ser auténticos? - Evitar la mentira y la personalidad
múltiple. Ser el mismo siempre, independientemente de las circunstancias. -
Cooperación y comprensión para evitar el deseo de dominio sobre los demás,
respetando sus derechos y opiniones. - Ser fieles a las promesas que hemos
hecho, de esta manera, somos fieles con nosotros mismos. - Cumplir responsablemente con las
obligaciones que hemos adquirido. - Hacer a un lado simpatías e intereses
propios, para poder juzgar y obrar justamente. - Esforzarnos por vivir las
leyes, normas y costumbres de nuestra sociedad. - No tener miedo a que «me
vean como soy». De cualquier manera, mientras no hagamos algo para cambiar,
no podemos ser otra cosa. La autenticidad da a la persona una natural confianza, pues con el
paso del tiempo ha sabido cumplir con los deberes que le son propios en el
estudio, la familia y el trabajo, procurando perfeccionar el ejercicio de
estas labores superando la apatía y la superficialidad, sin quejas ni
lamentaciones. Por la integridad que da el cultivo de este valor, nos
convertimos en personas dignas de confianza y honorables, poniendo nuestras
cualidades y aptitudes al servicio de los demás, pues nuestras miras van más
allá de nuestra persona e intereses. www.encuentra.com |