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DON ROSENDO GUTIERREZ Maestro y precursor de la industria del cuero en el
Norte |
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A
pesar de los nuevos productos de la más alta tecnología que invaden los hogares, las oficinas
y fábricas, en nuestra sociedad todavía es necesario y aún, admirado el arte milenario
de ¡Sí!....
Este arte milenaria en esta ciudad tiene un precursor; el maestro Rosendo
García, quien posee una de las más prestigiosas y competitivas talabarterías
estelianas. El trabajo del maestro, también ha servido de semillero para
nuevas generaciones de talabarteros que continúan ensanchando este noble
oficio con sus magníficos talleres y creaciones sin límites. El dice
jovialmente: ellos son hijos -nacidos en esta misma fábrica- y no los veo
como competencia. Como dijeran los economistas, los nuevos talabarteros son
parte del conglomerado del cuero esteliano. Nacido
y criado en Estelí, a sus 18 años de edad, el Maestro –Rosendo Gutiérrez-
comenzó a trabajar y aprendió un oficio; -él expresa- “necesitaba ganar un
poco más de dinero”. Con dedicación y entusiasmo, aprendí todo sobre el arte
de la talabartería y decidí iniciar mi “pequeña fábrica”. Sin
embargo, en la década de los 80’s perdió todo lo que tenía a causa de un
incendio, por lo que se vio obligado a alejarse del sector talabartero por un
tiempo. En esos años se dedicó a su finca, trabajo que le gusta, pero no lo
apasiona lo suficiente, como el oficio de la talabartería. Después
de 5 años de ausencia, logró levantar una vez más su negocio, valiéndose del
financiamiento de algunos bancos. Así comenzó nuevamente, y “de las cenizas
surgió mejor que nunca Talabartería El Progreso del Maestro Rosendo García”;
escuchar esto, a él lo llena de mucha satisfacción. Actualmente
emplea al menos a 20 personas. El éxito de Don Rosendo, radica en la
seguridad que mantiene ante la tarea que realiza y por supuesto la atención
personalizada y atenta que brinda a sus clientes. Talabartería El Progreso
también, exporta albardas, monturas y suelas entre otros a Honduras, El
Salvador y muy recientemente a Guatemala; países que -según el maestro-,
prefieren los productos de calidad y con precios cómodos. Las exportaciones
anuales, especialmente de monturas, están valoradas aproximadamente en 300
mil córdobas. El
maestro de 58 años, se encuentra satisfecho y muy contento con lo que ha
conquistado a lo largo de su vida; su principal orgullo son sus 7 hijos,
quienes han aprovechado la oportunidad que él les ofreció, y concluyeron sus
estudios universitarios. El
se considera un hombre muy afortunado, que logró las metas que se había
trazado, tanto para sí mismo como para su familia. Ahora su única meta, es
“continuar de pie al frente de la mejor talabartería de Estelí” y ver el
éxito de sus hijos como profesionales. La
variedad de estilos que se aprecian en el mercado en las distintas albardas o
la alta calidad de las monturas, no pueden verse sin pensar en la capacidad
de Don Rosendo García, hombre de grandes metas. Equipo
Revista El Esteliano Tel.00 www.elesteliano.com |
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