JORGE LUIS GONZALEZ CALDERON

"CUALQUIER LABOR ES DIGNA CUANDO SE REALIZA CON AMOR"

 

El secreto de la felicidad no es hacer siempre lo que se quiere, sino querer siempre lo que se hace.

 

 León Tolstoi

            Jorge Luis Gonzáles Calderón, originario de esta gran ciudad,             trabajador, responsable, amable con toda su clientela. Hombre de tez morena, delgado, pero fuerte; su rostro refleja el trabajo de muchos años, sin embargo no ha perdido el carisma y la alegría propia de sus 35 años, a pesar de que desde los 9 años aprendió el oficio como él lo define de limpia botas.

Descendiente de una familia pobre, huérfano de padre, con seis hermanos a cargo de su madre y con muchas necesidades por solventar en el hogar, decidió a sus nueve años adentrarse en el mundo laboral, con el propósito de ayudar en los gastos. El parque central fue el segundo hogar de este joven, ha permanecido ahí desde hace más de 25 años.

El nos cuenta, que aquí lo encontramos desde la 6 de la mañana hasta la 6 de la tarde; que atiende alrededor de 25 clientes al día, alcanzando cifras superiores a los 35 clientes los fines de semana, que las ganancias son muy buenas ya que pueden hacer entre 100 y 120 córdobas diarios y los fines de semana hasta 250 córdobas, dinero que para solventar los gastos del hogar, ayudar a su mamá que es de avanzada edad y a sus dos hijos.

Continúa diciendo; que durante estos 25 años las experiencias han sido variadas, que antes las personas tenían un mal concepto de ellos y los discriminaban, pero que hoy en día eso ha cambiado, afirma que las personas ahora son más amables y accesibles, que en este oficio se conoce a personas de diferentes estratos sociales.

El  expresa; en el parque he tenido muchas experiencias; con mis amigos, los clientes, me asombro porque ellos son fieles con nosotros, nos remuneran bien y hasta aguinaldo nos dan en Diciembre. Estando aquí he ganado cuatro veces el título de lustrador más rápido. Estoy orgulloso de lo que hago, este es un trabajo decente y honrado. Afirma con entusiasmo. 

Es un hombre ejemplar, a pesar de haberse criado en la calle y de no haber estudiado, nunca anduvo en vicios, ni en vagancias. Su vida ha sido trabajar diariamente, para ganarse el pan de cada día, luchando para que sus hijos estudien y tengan mejores oportunidades que las que él tuvo.

En el futuro, pretende continuar con sus labores diarias, ofreciendo siempre un servicio con calidad y amabilidad. Además mantiene que va a trabajar hasta donde Dios y sus fuerzas le permitan.

Insta a la sociedad  en general, ha apoyar a los “limpia botas” del parque central, a las autoridades les hace un llamado para que mejoren las condiciones de las casetas donde ellos se encuentran. 

Fomentemos en nuestra juventud; el respeto hacia nuestros semejantes, el amor y valor del trabajo.

Equipo de Revista El Esteliano

 

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